BORDEAUX

Día 1 - 3

Conocida mundialmente por sus increíbles vinos y amada por su grandiosa arquitectura, los visitantes se enamorarán de Burdeos. Su centro, inscrito en la lista de la UNESCO, cuenta con una pintoresca mezcla de catedrales, iglesias y torres góticas, extensas plazas, mansiones del siglo XVIII y edificios contemporáneos que albergan museos y galerías, y los amantes de la gastronomía estarán encantados con la variedad de excelentes restaurantes, cafés y bares de la ciudad. Un viaje a Burdeos no estaría completo sin visitar sus ondulantes viñedos, donde podrá degustar las especialidades locales en castillos históricos.

SAINT-ÉMILION

Día 3 - 4

Saint-Émilion es una pequeña ciudad vinícola situada a 35 km (22 mi) al noreste de Burdeos, entre Libourne y Castillon-la-Bataille, en la región de Nouvelle-Aquitaine, en el suroeste de Francia. Es una ciudad medieval del departamento de la Gironda y se alza magníficamente en lo alto de la colina que domina el valle de la Dordoña. La ciudad es un increíble museo al aire libre con un ambiente medieval y cuenta con numerosos bares, restaurantes y tiendas de vinos para explorar. Los restos más sorprendentes son probablemente sus monumentos subterráneos: una iglesia monilítica única y más de 70 hectáreas de excavaciones subterráneas.

LA ROCHELLE

Día 4 - 6

La Rochelle es una ciudad que data del siglo IX en el departamento de Charente-Maritime, Francia. Del siglo XIV al XVII fue el principal puerto francés para el comercio a través del Atlántico con Canadá y las Antillas francesas. A menudo se la llama "la ville blanche" (la ciudad blanca) por sus edificios de piedra caliza: son bonitos con cualquier tiempo, pero brillan cuando el sol brilla desde un gran cielo azul del Atlántico. La ciudad se centra en el viejo puerto, el Vieux Port , con tres grandes torres defensivas. A 3 km al sur, Les Minimes es una zona nueva construida sobre terrenos ganados al mar. La Rochelle está unida por un puente a la isla turística de Île de Ré , de unos 30 km de longitud. Otras islas son la de Aix, la de Oleron (a la que se suele acceder por carretera a través de Rochefort) y la que ha visto en la televisión, Fort Boyard.

ROCAMADOUR

Día 6 - 8

Encaramado en un acantilado con vistas al exuberante entorno del Parque Natural Regional de Causses du Quercy, Rocamadour es un pueblo encantador que cuenta con una rica historia. Conocido por ser un antiguo lugar de peregrinación, hoy en día los visitantes pueden admirar su impresionante santuario en el acantilado y el imponente castillo medieval. Sus evocadoras callejuelas albergan acogedores cafés, restaurantes tradicionales y tiendas especializadas, y en las inmediaciones encontrará un parque de aves y un bosque de monos.

BIARRITZ

Día 8 - 10

La ciudad costera de Biarritz ha sido durante mucho tiempo una de las favoritas para las escapadas de verano en la costa suroeste de Francia, que fue el destino elegido por Napoleón III y su esposa Eugenia y que hoy es la capital del surf del país. Su encantador centro alberga elegantes villas del siglo XIX y fachadas art decó, y cuenta con museos, iglesias e incluso un casino, aunque lo más destacado son, sin duda, sus largas playas de arena. Ya sea para coger olas, relajarse en las arenas doradas o disfrutar de la próspera escena gastronómica y nocturna, Biarritz no le decepcionará.

BORDEAUX

Día 10 - 10

Conocida mundialmente por sus increíbles vinos y amada por su grandiosa arquitectura, los visitantes se enamorarán de Burdeos. Su centro, inscrito en la lista de la UNESCO, cuenta con una pintoresca mezcla de catedrales, iglesias y torres góticas, extensas plazas, mansiones del siglo XVIII y edificios contemporáneos que albergan museos y galerías, y los amantes de la gastronomía estarán encantados con la variedad de excelentes restaurantes, cafés y bares de la ciudad. Un viaje a Burdeos no estaría completo sin visitar sus ondulantes viñedos, donde podrá degustar las especialidades locales en castillos históricos.